Dime tu edad y te diré qué pueden hacer por ti los polinucleótidos
Polinucleótidos o el futuro de la medicina estética
Esta no es la primera vez que hablamos sobre los polinucleótidos en nuestros artículos. Pero es la primera vez que te contamos qué pueden hacer por ti dependiendo de tu edad. ¿Y por qué hemos decidido hablar sobre este tema? Porque sabemos que existe una falsa creencia sobre cómo los tratamientos de medicina estética son procedimientos para personas de avanzada edad o con patologías concretas.
Sin embargo, en el caso de los polinucleótidos, logramos adaptar los resultados a cualquier edad, ya que trabajan de forma directa sobre la producción de colágeno y elastina de cada persona. De esta forma, logramos tratamientos 100% versátiles y con una capacidad total de adaptabilidad que reforzarán tu piel en aquellos aspectos que sean necesarios para que puedas verte mejor.
Además, si hay algo que nos encanta, es que no aportan volumen o modifican nuestra expresión facial. Es decir, se trata de un tratamiento regenerativo que te ayudará a reencontrarte con la mejor versión de tu piel ( y de ti mismx).
Si tienes entre 20 y 35 años apuesta por la prevención
Como ya sabemos, en el contexto de la medicina estética, los polinucleótidos se utilizan para estimular la regeneración celular y mejorar la apariencia de la piel. De hecho, son conocidos por utilizarse en hospitales para regenerar pieles que habían sido quemadas y buscan una regeneración lo más natural posible de los tejidos.
En la juventud, tu piel puede verse afectada por las exposiciones dañinas a la contaminación, el tabaquismo, la radiación ultravioleta o una mala alimentación. Por lo tanto, una buena rutina de skincare y los polinucleótidos pueden ayudarnos a prevenir futuros daños en la piel como arrugas incipientes o manchas solares ya que tienen un poder antioxidante y altamente hidratante.
Por otra parte, las cicatrices postinflamatorias o aquellas más profundas provocadas por el acné también pueden producirse en esta etapa debido a los brotes surgidos durante periodos de adolescencia. En este caso, los polinucleótidos se convierten en una opción regenerativa de alto valor que mejora y repara la textura y calidad de tu piel, logrando una tez más unificada y libre de marcas.
Si tienes entre 35 y 50 años es el momento de devolver el GLOW a tu piel
Los polinucleótidos, aunque son inyectables y procedimientos no invasivos, no tienen nada que ver con el ácido hialurónico, que es una sustancia que sirve para rellenar y voluminizar, no para regenerar. Es un tratamiento óptimo para pacientes entre 35 y 50 años porque se trata de sustancias con las que conseguimos resultados naturales en el rostro. Los polinucleótidos son inyectables que emplean fracciones de ADN filtradas, purificadas y esterilizadas para rejuvenecer la piel gracias al ADN del salmón. Esta sustancia es capaz de estimular los fibroblastos, promover la reparación de tejidos, mejorar la renovación celular y favorecer la producción de colágeno
A medida que llegamos a la mediana edad, alrededor de los 35 años, el cuerpo comienza a experimentar cambios en la forma de envejecer y disminuye paulatinamente su producción de colágeno. Esto puede acarrear consecuencias como tirantez, aparición de arrugas más profundas y una pérdida notoria de la elasticidad.
¿Alguna vez te has mirado al espejo y has notado tu rostro cansado y tu piel apagada? Es una sensación que puede ser ocasionada por la acumulación del estrés oxidativo y el envejecimiento prematuro del rostro. Gracias a los polinucleótidos inyectables podemos devolver a la piel esa tersura y brillo original con un protocolo completo.
A partir de los 50 años, la mejor opción para renovar tu piel
Si tienes más de 50 años hay algo que mereces saber.
En primer lugar, enhorabuena por haber llevado de la mejor forma posible tu belleza y personalidad a lo largo de los años. En segundo lugar, bienvenida a la nueva era de los polinucleótidos que buscan renovar tu piel y redensificarla, actuando sobre las arrugas, la flacidez y las alteraciones de la pigmentación que hayas podido sufrir a lo largo de tu vida.
Los resultados de la infiltración con polinucleótidos serán visibles tras la primera sesión, provocando un cambio en la calidad de tu piel a corto y largo plazo. Además, gracias a su capacidad regenerativa, los polinucleótidos estimulan la producción de colágeno para mantener la piel hidratada y firme desde el interior, de manera fisiológica y favoreciendo la regeneración celular.
Además, lejos de buscar un efecto de cara “hinchada” provocado por tratamientos de sobrecorrección con ácido hialurónico, los polinucleótidos son una alternativa tentadora que no modifica tu rostro y mejora considerablemente los signos del envejecimiento.
Por último y no menos importante, nos gustaría destacar la importancia de la seguridad del tratamiento que ha sido testado bajo criterios precisos de seguridad y eficacia en la mejora de la textura y el rejuvenecimiento de la piel.