Polinucleótidos: El tratamiento perfecto después del embarazo
Como ya sabemos, las mujeres embarazadas deben ser cautelosas con los tratamientos de medicina estética debido a los posibles riesgos para ellas y sus bebés. Durante el embarazo, el cuerpo experimenta una serie de cambios hormonales y fisiológicos que pueden afectar la forma en que reacciona a ciertos procedimientos médicos y cosméticos.
A lo largo del embarazo, la sensibilidad de la piel y las reacciones alérgicas pueden ser impredecibles, lo que aumenta el riesgo de complicaciones. En este sentido, debido a la serie de factores de cambio que experimenta el cuerpo de una mujer embarazada, es posible que acarreen algunos cambios físicos tras el parto.
A continuación, revisaremos cómo intervienen los polinucleótidos en la recuperación post-parto y cómo pueden mejorar su apariencia física, y en consecuencia psicológica de una forma natural y sostenible.
Los polinucleótidos: una alternativa sostenible y versátil
Sabemos que, durante el embarazo, te tocará cambiar por completo tu rutina de skincare y prescindir de retinoides y demás derivados de la vitamina A, del ácido salicílico, del ácido glicólico y los alfahidroxiácidos (AHA), entre otros. Estos ácidos se encuentran comúnmente en exfoliantes y tratamientos para la piel, y pueden aumentar la sensibilidad de la piel al sol.
Por esta razón, así como por otros cambios hormonales, es posible que tu piel experimente cambios notables durante el embarazo que quieras reparar tras el proceso. En este camino, los polinucleótidos se han convertido en el aliado perfecto para recuperar tu piel tras el embarazo gracias a su versatilidad, tolerancia y poder bioestimulador.
Los polinucleótidos son moléculas formadas por la unión de varios nucleótidos, que son los bloques de construcción de los ácidos nucleicos como el ADN y el ARN. Su poder bioestimulador ayuda a tratar de forma visible los signos del envejecimiento, como son las arrugas o la pérdida de elasticidad y firmeza de la piel. En una rutina de cuidados post-parto, los polinucleótidos pueden ayudar a corregir y mejorar las siguientes secuelas producidas por el embarazo.
Mejora de la hidratación facial debido a los cambios y sequedad producidos por el embarazo
Durante el embarazo la piel seca es bastante común y puede ser causada por varios factores hormonales y físicos. Los niveles hormonales fluctúan, lo que puede afectar la producción de aceites naturales en la piel. Además, el aumento del volumen sanguíneo puede hacer que la piel se sienta más estirada y seca.
Gracias a los polinucleótidos, estimulamos la regeneración de la piel, debido a la producción de colágeno y elastina. Con este tratamiento, logramos mejorar la elasticidad y flexibilidad de la piel pérdida en el embarazo, aumentando la hidratación profunda y contribuyendo al engrosamiento de la dermis desde el interior.
Mejora de las secuelas del acné hormonal producido durante el embarazo.
El acné durante el embarazo es otro problema común de la piel que muchas mujeres experimentan debido a los cambios hormonales. Teniendo en cuenta esa fluctuación hormonal de la que hablábamos anteriormente, también puede producirse una sobreestimulación de las glándulas sebáceas de la piel, aumentando la producción de sebo y obstruyendo los poros. Esto puede llevar a la formación de granos y brotes de acné
Los polinucleótidos estimulan la producción de colágeno y elastina y lograr recuperar la textura y elasticidad del rostro. Por lo tanto, son una de las mejores opciones para el tratamiento de imperfecciones y cicatrices de acné o cicatrices atróficas producidas por los brotes durante el embarazo. Además, no solo mejoran la calidad de la piel, si no que contribuyen a atenuar las cicatrices postinflamatorias recientes que conocemos como esas manchas rojas que quedan en el rostro.
Mejora de la flacidez corporal producida en abdomen
La flacidez después del embarazo es un problema común que muchas mujeres experimentan debido a los cambios físicos que ocurren durante la gestación y el parto. Durante el embarazo, la piel se estira para acomodar el crecimiento del bebé, y después del parto, puede tardar algún tiempo en recuperar su elasticidad y firmeza.
Gracias a los polinucleótidos, podemos contribuir de forma eficaz a mejorar la tersura y recuperación de esa piel distendida que puede aparecer en el abdomen tras el embarazo. ¿Lo mejor? Los polinucleótidos también pueden mejorar la apariencia de las posibles estrías causadas durante el embarazo gracias a su poder reparador. Además, es un tratamiento combinable con otros procedimientos de aparatología y medicina estética para garantizar resultados seguros.
Notarás como tu piel recuperará su elasticidad y se verá más firme y tersa. Y todo esto sin dolor, sin anestesia y con efectos visibles desde la primera aplicación.
Por último, nos gustaría recordarte que cada embarazo y cada piel son únicos, por lo que es importante hablar con tu médico o dermatólogo sobre cualquier preocupación o pregunta específica que tengas sobre tu rutina de cuidado de la piel durante y después del embarazo.